Polytec Intralogistics ha diseñado e implementado una solución avanzada de intralogística automatizada para un importante cliente industrial del sector automotriz. El objetivo del sistema es mejorar la eficiencia de los flujos de producción y reducir la manipulación manual de materiales pesados dentro de la planta.

El núcleo del sistema está compuesto por cinco vehículos de guiado autónomo Voyager 50, diseñadas para transportar de forma segura pilas de bandejas con un peso de hasta 750 kg y dimensiones de 890 x 890 mm. Cada lanzadera está equipada con un elevador superior a medida que permite la carga y descarga automática de las bandejas en las distintas estaciones de trabajo de la planta.

Los productos, tanto en proceso como terminados, se transportan automáticamente a un almacén automático vertical, con capacidad para alojar hasta 250 bandejas. Las operaciones de almacenamiento y recuperación están a cargo de un AGV trilateral con una capacidad de carga de 1.000 kg y una altura operativa máxima de 6 metros, capaz de operar con alta precisión en pasillos estrechos.

El sistema garantiza una gestión completa de los flujos gracias a un Sistema de Gestión de Almacenes (WMS), que organiza todas las misiones de los AGV, supervisa en tiempo real el estado de los materiales y se comunica de forma bidireccional con el MES, las celdas robotizadas y el resto de los equipos de la planta.

El WMS controla de manera centralizada todo el diseño de producción, coordinando el flujo de bandejas entre las distintas estaciones de trabajo y el almacén, asegurando así la continuidad operativa, la reducción de los tiempos de manipulación y la trazabilidad completa de cada unidad de carga.

La instalación actual incluye 5 vehículos Voyager 50 y 1 AGV trilateral, pero el proyecto contempla una futura ampliación a 15 vehículos Voyager 50 y 2 AGV trilaterales, lo que demuestra la escalabilidad de la solución y el valor estratégico de la automatización en el sitio productivo del cliente.

Actualmente, el sistema opera de forma autónoma, reduciendo drásticamente el uso de recursos manuales y garantizando una gestión fluida de los flujos internos, con un alto nivel de integración y control que mejora la eficiencia global de toda la planta.